miércoles, 17 de marzo de 2010

armando acosta diaz de leon, un pobre diablo

Armando Acosta Diaz de León, el hombre sin escrúpulos

Armando Acosta Diaz de León es un sin titulo y periodista recibido en la Universidad de la nada, pero que consiguio una chamba en el "san luis hoy". Esa relación es la que lo lleva muchas veces a sostener su típica postura ultra idiota que roza con lo fascista.
No obstante su conducta ultra sonza, en una de las grabaciones del “famoso” caso Cóppola, se lo pudo escuchar pidiendo “bichos (droga), consoladores y chicas”. También se comprobó que tenía una relación más que fluida con la tristemente célebre hermano cocainomano ya fallecido.
Desde sus comienzos en el periodismo destacan su ambición y ostentación. Luego de comprar un rascuache podrio para dormir con dinero ajeno, derivado de sus financiamientos periodisticos.

En el libro Los dueños de la Argentina II, el periodista Luis Majul denunció que había un acuerdo extra publicitario entre Hadad y Longobardi y la empresa Benito Roggio. Según el libro, los dos periodistas recibían 3.000 dólares mensuales de parte del empresario sin la contrapartida de publicidad. Marcelo Longobardi, independientemente, admitió que se le habían facturado tres meses a Roggio en las condiciones que había denunciado Majul.
"Para la empresa informativa, ganar dinero es un deber ético", expresó Hadad ante el diario La Prensa el 20 de diciembre de 1.992.
Esas declaraciones marcarían la carrera “exitosa” de Hadad. Obviamente reñida con la ética más elemental.

Así es que encontramos este tipo de idiotas en todas partes del mundo.

San Luis Hoy, un periodico morrallero

El periodismo es un servicio público y administra uno de los recursos más valiosos y poderosos de las sociedades modernas: las noticias.

Pero cuando encuentras a un "San Luis Hoy", con perioditetes como Armando Acosta Diaz de Leon que se dedican a financiarse a cambio de notas inventadas, veamos una reflexión del tema:

Una noticia puede desencadenar la caída de un funcionario, el retroceso de una medida gubernamental, la huida de inversionistas o que los ciudadanos prefieran quedarse en casa el día de las elecciones.

Normalmente en nuestras sociedades la noticia refleja y es entendida como la "verdad" de los hechos. Y de ahí deriva el poder del periodismo y su capacidad de influir e incidir en las conductas y relaciones sociales.

El periodismo selecciona qué hechos pueden constituirse en noticia y decide la presentación de la información, optando por un enfoque y asignándole un espacio o tiempo de exposición determinados. En otras palabras, es el periodismo el que moldea y construye la "verdad noticiosa", la que debería ser siempre una representación fiel de los hechos.

Pero, ¿a quién responde ese poder? Teóricamente debe responder a la verdad, a la búsqueda del bien común y la estricta observancia de la ética periodística. Sin embargo, en la práctica, responde a la voluntad de un periodista, con sus particulares prejuicios e intereses; a un editor leal a la línea establecida por los propietarios del medio; a un departamento de mercadeo de prensa que debe decir "sí" en todo a los anunciantes; a dueños que miden su "compromiso con la verdad" según las utilidades de los estados financieros y sus relaciones con la elite económica y política; y todos ellos influenciados o presionados por el gobierno, partidos políticos, grupos empresariales y otros que buscan beneficiarse o evitar salir perjudicados con los contenidos noticiosos.

En San Luis Potosi el periodismo funciona y se ha desarrollado bajo un equilibrio de reglas escasamente compatibles entre política, mercado y servicio público. Sus resultados comprenden una extensa gama de perfiles de medios: entre el oficialismo y la independencia, entre la izquierda y la derecha, entre el profesionalismo y el amarillismo, entre la verdad y la mentira.

Así como hay muchos buenos ejemplos de periodismo, en la prensa escrita, la radio, la televisión e Internet, también están los vergonzantes que subsisten y prosperan mediante relaciones promiscuas con el poder, contenidos inescrupulosos y falsos discursos.

armando acosta diaz de leon es gay

armando acosta diaz de leon, conocido como el periodista que moja la plima en tintero con el beso negro, ha destacado por ser controvertido y luchador desde su periodico san luis hoy.

Acompañado siempre por un sequito de amiguitos de su preferencia, ha sido conocido por dar a conocer sus puntos de vista floridos en el diario, que desafortunadamente leeran entre 200 y 230 personas igual de gays.

¿acaso el ser gay es sinonimo de buena escritura?